El día tal de Mayo fuí a Annecy por segunda vez. La verdad, es que pasé menos frío que la otra vez aunque mis pobres manos no dirían lo mismo. Estrené mis botas, y tan contenta.
Estos son jabones en grandes dimensiones; mi mano es 1/10 comparado con eso, así que calculad. El de color verde llamativo tenía una etiqueta donde ponía: Pandora. (juzgad vosotros mismos xD)
A continuación, os dejo clases de jabones. Qué creatividad. Mira que yo tengo mucha pero nunca pensé que la gente se aburriera tanto. De hecho, me daría pena lavarme con estos modelos, porque tarde o temprano se deformarían y luego haber cómo explicas a tus invitados la forma del jabón...
-No, es que tenía forma de gamba.
Y tu; Si, ya ¬¬...
También puede haber el caso en el que tu abuelo haya salido del baño soltando espuma por la boca. No te preocupes, se ha comido la palomita del baño. Por experiencia propia, no os asusteis. Y no, mi abuelo nunca se ha comido el jabón pero un día me le encontré comiendo comida de mi perro:
-Oye, pues estas galletas están ricas aunque saben algo raro.
-Abuelo, ¿de qué hablas?
-Pues de las galletas que estan en una bolsa detrás de la puerta.
-¿Qué galletas? ¡Te estás comiendo la comida del perro!
-Ah, ¿si? Pues no lo sabía.
En fin, mi abuelo es así de raro. Ya os contaré más cosas de él; al menos yo me parto de risa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario