Give them food xD

martes, 8 de septiembre de 2009

Locura


Las cartas que se escribieron se quedaron solas.
Se secaron mientras el tiempo descosía mi sonrisa. Y cuando abría los ojos para ver otro día se cerraban con dolor los pálpitos de mi corazón.
Dolía cuando sentía el vacío,
Dolía ver en desuso mi amor.

La fragancia que desprendías se quedó en tus libros.
Las risas resonaban en las paredes de mi mente.
Mis ojos lograban memorizarte,
mis oídos podían reproducirte.
Yo podía hacerte ilusión,
podía hacerte irreal,
podía hacer de mi mundo algo coherente si tu imagen permaneciera
podía convertirte en alguién que yo quisiera.
En quién yo quisiera.
Pero aún siendo palpable y existente,
habías logrado desaparecer.
Me habías dejado sola, y yo te había perdido.
Y me había perdido.
La razón que sostenía con ahinco,
todavía permanecía en mis manos...Había permanecido conmigo hasta el final.
Sólo hasta que destrocé lo que quedaba de ella...
Y quedó de ti en mi el vacío.

Los recuerdos se agolpaban en mi cabeza, se cernían sobre sobre ese cárdeno corazón,que mantenía inquieto mi amor. Todo aquello que mantenía vivos los cendales de niebla que atormentaban y molestaban la tristeza de mi soledad.


Todo aquello que se mantuvo en pie durante mi existencia, se disipaba, y moría con la calidez de tu presencia.Y cuando tu desapareciste, yo quedé muerta en vida. En una vida eterna, lenta y constantemente solitaria.


Y todavía lograba reproducir con angustia:

La voz que me besaba,
se quedaba inerte en mi cuello.
Su aliento a canela prendía de incienso el ambiente.
Un ambiente que absorbía sus labios.
Unos labios que destruían la razón de mi corazón.

lunes, 6 de abril de 2009

El tiempo no espera a nadie


A veces me encantaría ser un soldado para que así pudiera controlar el tiempo; mantenerlo al margen de lo imposible y aprovecharlo. Cuántas veces me habré dicho a mi misma: Ojala pudiera dar marcha atrás en el tiempo. Y encima, es un sueño lejano. No es imposible; puedo soñarlo, ¿no? Pero supongo que no me conformo con sólo eso; es cierto que no me basta pensarlo. Necesito hacer esa acción. Necesito hacerlo; hacer el tiempo mío.
Pero esta no es de esas veces.
Es verdad que lo hubiera querido hacer, como hace unos instantes. No es bueno desearlo, lo aconsejaría si así fuera lo que debiera hacer. Pero como no soy el conductor del tren, ni programo la hora en cada lugar… Por eso, sería mejor dejar el tiempo donde está.
No deseo saber qué se siente al rozar ese poder, o quizás si. Aún así, no niego que las cosas serían maravillosas: se podría repetir mil veces un fin de semana y estar pensando que estas de vacaciones cuando solamente estás haciendo segundo de bachiller y todavía no has terminado. He tenido deseos peores, aunque espero que no se cumplan ninguno; si se cumpliera la irracionalidad del hombre cada vez que pensamos ya estaríamos todos acabados. No por nada, simplemente me da la sensación de que nuestro odio pasa los límites de la locura humana.
En ocasiones he querido creer que la imaginación fuera la reina del reloj de nuestra vida, que la realidad fuese otra cosa diferente a la que es.


Es cuando sientes un sentimiento tan vivo que necesitas expresarlo y plasmarlo en lo que sea que tu quieras en ese momento. Te sientes feliz y eso te mueve; te empuja a lo que s anhelas. Pero eso son sólo instantes de segundos, según mí parecer. El tiempo es la misma sensación de fuerza y energía pero simplemente no se plasma; acontece, pasa, ocurre,…traspasa y se sigue escapando hasta el infinito.
Como iba diciendo, es nuestro reloj el que está corriendo de tiempo.
Ahí queda la cosa.